Se acerca peligrosamente el 31 de Octubre y con el la terrorífica noche de Halloween. Poco a poco en España nos vamos empapando de esta fiesta americana y vamos engalanando nuestras casas con calabazas, fantasmas, vampiros, telas de arañas...
En casa no ponemos mucha decoración pero si lo celebramos comiendo. Que gran excusa ser "la fiesta de..." para poder hacer un dulce y poder comérnoslo ¿verdad? Esta vez te traigo un postre de lo más vistoso para Halloween y de lo más rico que hayas probado en mucho tiempo.
Para hacer esta falsa crumble he utilizado las galletas integrales Virginias. La única galleta Integral, fuente de Fibra, baja en Sal, 100% Vegetal, Sésamo y un aporte de Calcio. Sin Azúcares añadidos, Sin Fructosa y Sin Lactosa. He hecho el matrimonio perfecto con la almendra crocanti y la mantequilla para crear una capa crujiente sobre la fruta.
La combinación de sabores y texturas es magnífica. La fruta queda en una capa uniforme al agregarle la gelatina. Si te apetece que quede la fruta sin ese cuerpo puedes prescindir de añadirle la gelatina.
He llamado esta receta falsa crumble porque no va al horno y el crujiente que va por encima no se prepara como tal para una crumble pero el aspecto es muy similar. Este dulce se come frío y la crumble original se ha de tomar caliente o tibia.
Prueba a hacerla este 31 de Octubre y verás como sorprendes en casa. Los tuyos te van a comer el cuello a mordiscos.
Ingredientes:
- 250 g de frambuesas.
- 80 g de azúcar.
- 1/2 hoja de gelatina.
Para la crumble:
- 3 galletas integrales Virginias (15 g).
- 10 g de almendra crocanti.
- 10 g de mantequilla fría cortada en dados.
Preparación:
En un cazo pondremos las frambuesas y el azúcar. Dejaremos que hierva por espacio de 8-10 minutos a fuego medio para que se haga un puré denso. Mientras hidrataremos la media hoja de gelatina. Una vez hecho el puré de frambuesas agregaremos la gelatina hidratada y removeremos bien para que se disuelva. Verteremos en los vasos de presentación y meteremos en la nevera por espacio de 4 horas. Para hacer la crumble desharemos las galletas integrales con las manos, son tan tiernas que se harán trocitos pequeños sin hacer apenas presión. Añadiremos la almendra crocanti a las galletas troceadas toscamente. Finalmente incorporaremos la mantequilla y con la yema de los dedos mezclaremos todos los ingredientes de la crumble. Con ayuda de una cuchara se lo añadiremos a cada vasito.