Os presento el BIZCOCHO. De lo mejorcito que he probado en mucho tiempo. Es tierno, jugoso y con saborazo. Además se prepara en un abrir y cerrar de ojos. Vamos que lo tiene todo para ser el ideal para prepararlo este otoño invierno.
He usado dulce de leche, en concreto el de la marca Chimbote que es el que tenía en casa. El resultado, como os he dicho más arriba, es fantástico.
Es genial para el desayuno o para la merienda (yo me lo como a cualquier hora la verdad). Y ya si quieres quedar como un señor/señora se lo pones a tus invitados con un café calentito y triunfas seguro.
Ingredientes:
- 4 huevos.
- 400 g de dulce de leche.
- 50 g de mantequilla derretida.
- 1 cucharadita de extracto de vainilla.
- 120 g de harina.
- 8 g de levadura química.
Preparación:
Batir los huevos con ayuda de las varillas de la batidora hasta que doblen el volumen. Agregar la mantequilla derretida y fría. Incorporar el dulce de leche y el extracto de vainilla. Mezclar. Finalmente añadir los ingredientes secos tamizados, la harina y la levadura. Unir todo bien con movimientos envolventes. Verter en un molde de cake, previamente engrasado, con capacidad para un litro. Hornear a 180º (horno precalentado con calor arriba y abajo) durante 40-45 minutos o hasta que lo pinchemos y el palillo salga limpio.