Ya estamos casi a finales de mes y yo sin presentaros la galleta que corresponde a Marzo. Tenía preparada otra receta pero esta que os traigo me venía mucho mejor ya que en la caja
Degustabox de este mes entraba un té muy especial y estas están elaboradas con él.
Los que me conocen, y vosotros que seguís el blog, ya sabéis que no me gusta el té. De veras que lo he intentado pero no puedo... no puedo bebérmelo. De hecho cuando tengo el estómago un poco delicado y me tomo una manzanilla, porque no me queda más remedio, me encomiendo a todos los santos para acabarme la taza.
He utilizado el
té Chai, es un té negro, con canela, raíz de achicoria, jengibre, cardamomo, aroma natural de vainilla, aroma natural Chai, dulces hojas de zarzamora, clavos de olor, anís estrellado, pimienta negra. Casi nada ¿eh? Con todas estas especias hace que la galleta tenga un sabor único, auténtico, original y totalmente innovador.
Pero... como ya me ha pasado otras veces... el té utilizado para hacer dulces ¡¡me encanta!! Así me pasó con las
magdalenas de chocolate y té matcha o los
matcha cupcakes. Y me dije... ¿por qué no probar con galletas? Y se ha abierto un universo ante mi. Voy a reversionar unas cuantas recetas que tengo en el olvido e introducirles diferentes tés que tengo en casa a los que no sabía como darles salida.
La receta es de
Bertha y según la publicó en su blog me llamó muchísimo la atención y provocó la necesidad de tener que hacerlas y probarlas. He de deciros que los probaron mis suegros y les ha gustado mucho y eso que no son mucho de dulces, sobre todo mi suegro. Así que creo que gustarán a casi todo el mundo cuando las preparéis.
Ingredientes (12 unidades):
- 100 ml nata líquida (yo usé de la de montar).
- 2 bolsas de té Indian chai Pompadour (8 grms).
- 100 grms de harina.
- 60 grms de almendra molida.
- 1/2 cucharadita de levadura química.
- 75 grms de azúcar.
- azúcar glass para rebozar las galletas.
Preparación:
En un bote hermético pondremos la nata y verteremos el contenido las bolsas de té, taparemos y lo dejamos infusionar al menos 6 horas, yo lo tuve 24 horas. Pasado este tiempo, pondremos en un cazo al fuego hasta que hierva, retiraremos y colaremos. Dejaremos enfriar. Para preparar la masa de las galletas mezclaremos en un cuenco los ingredientes secos a excepción del azúcar glass, es decir, la harina, la almendra molida, la levadura y el azúcar y lo mezclaremos bien. Posteriormente agregaremos la nata infusionada y amasaremos, con ayuda de las manos, hasta que todos los ingredientes estén bien integrados y obtengamos una masa firme, sin grumos y homogénea. No será pegajosa y tendrá muy fácil manejo. Taparemos y dejaremos reposar la masa 30 minutos en la nevera. Pasado este tiempo iremos cogiendo porciones de masa de unos 25 grms y haremos bolitas. Las rebozaremos con el azúcar glass, quitaremos el exceso, solo queremos que estén ligeramente rebozadas. Las iremos colocando sobre la bandeja de horno, sobre la cual habremos colocado papel sulfurizado o un silpat y las aplastaremos un poco. Las dejaremos reposar otros 30 minutos. Introduciremos en el horno, ya precalentado a 200º y con calor arriba y abajo, durante 15 minutos. Dejaremos enfriar unos minutos sobre la bandeja y después sobre una rejilla.