Tarta Tronco de Árbol

Septiembre, vuelta a la normalidad, a las rutinas, a los horarios de siempre... parece que ya empiezo a echar de menos el verano y eso que sigue haciendo buen tiempo (que dure por favor...).

Se que he estado unos cuantos días sin publicar ninguna receta pero entre que he estado unos días de vacaciones, una serie de enfermedades familiares, la organización y celebración del cumple de Ana; han hecho que esté un tanto desconectada de las redes y del blog. Pero vuelvo a la carga con las pilas cargadas al 100%.

Como bien os comentaba un poco más arriba el día 6 de Septiembre celebramos el cumpleaños de Ana (dos añitos ya ¡madre como pasa el tiempo!). Preparé muchas cositas para este gran día no solo de comida sino también de decoración y quedó todo realmente precioso. Además su primo Samuel (que cumplía un año) lo celebró también con ella, así que celebración por partida doble.

Reunimos a toda la familia y pasamos una tarde de lo más divertida, entretenida y golosa. Hoy os muestro la tarta que elaboré (aunque realmente le hice dos) para su celebración. Tiene cuerpo de galleta (receta de Sugar Mur) y el relleno y cobertura de chocolate and sour cream frosting que ya utilicé para la tarta de mi cumpleaños hace dos años, la receta aquí. Lástima que no le hiciera una foto al corte para que vierais lo preciosa que quedó por dentro.

La temática de la fiesta fue Rabbit party. Busqué mucha información en internet y mi gran fuente de inspiración Pinterest. Encontré cosas realmente bonitas y una de ellas fue esta preciosa y delicada tarta. Ya os iré enseñando que más cosas preparé para la fiesta de su segundo cumpleaños.

Para su elaboración me he valido de unas galletas que me chiflan, me encantan, me pierden; las galletas Digestive de Fontaneda. En mi casa nunca faltan. Me viene bien comerlas a cualquier hora y no siento remordimientos al devorar unas cuantas del tirón. Este mes he tenido la suerte de que entraran en mi preciada cajita de Degustabox así que las he disfrutado como nunca. 

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Ingredientes:

Para el bizcocho cookie:

- 12 galletas Digestive Fontaneda..

- 3 huevos.

- 15 grms. de levadura química.

- 75 grms de azúcar.

- 100 grms de mantequilla

Para la crema de relleno y cobertura (chocolate and sour cream frosting):

- 350 grms chocolate de cobertura.

- 400 grms nata líquida a temperatura ambiente.

- 30ml–60ml corn syrup (opcional) o azúcar glass.

Para la decoración:

Fondant de colores.

Preparación: 

Pulverizaremos las galletas en un molinillo de café o bien metiéndolas en una bolsa con cierre ZIP y pasaremos un rodillo por encima hasta hacerlas polvo. Echaremos los huevos, la levadura química tamizada, la mantequilla, el azúcar y mezclaremos. Finalmente agregaremos el azúcar y las galletas a esta mezcla. Verteremos en nuestro molde ya engrasado, yo utilicé uno de 16 cm para que la tarta quedara alta, y lo hornearemos (horno precalentado con calor arriba y abajo) 180º unos 20 minutos. Pincharemos con un palillo para comprobar que está hecho, lo sacaremos del horno y dejaremos enfríar por completo sobre una rejilla. 

Para la crema del relleno, el chocolate and sour cream frosting, derretiremos el chocolate a baño maría. Cuando el chocolate esté tibio añadiremos la nata  a temperatura ambiente y batiremos a mano con unas varillas hasta que obtengamos un color uniforme (si la nata está demasiado fría, el chocolate se enfriará y quedará con grumos). No lo batiremos demasiado, ya que es posible que pierda un poco la textura y se separe. Dependiendo del porcentaje de cacao que tenga nuestro chocolate, este frosting quedará más o menos amargo.Para ello iremos probando y añadiendo el corn syrup para endulzarlo un poco y dejarlo a nuestro gusto.Una vez fríos los bizcochos (yo hice dos) los partiremos por la mitad y colocaremos el primer bizcocho boca abajo. En la parte superior, extenderemos con una espátula una capa generosa del frosting. Repetiremos la operación con los siguientes bizcochos y terminaremos colocando el último bizcocho. Comprobaremos que los bizcochos están bien centrados. Eliminaremos todas las migas que hayan quedado. Aplicaremos una fina capa de frosting, que cubrirá todas las imperfecciones y para que selle de alguna manera el bizcocho. Lo dejaremos enfriar en la nevera aproximadamente unos 30 minutos. Pasado este tiempo, terminaremos aplicando una capa gruesa de frosting, lo mas uniforme posible a la tarta, y la terminaremos de decorar a nuestro gusto. Yo la dejé totalmente lisa y le hice unas estrías con ayuda de un tenedor. También hice un agujero en la tarta simulando que el conejo entraba por el árbol. Finalmente la decoré con fondant.

Caracolas de Crema Pastelera y Gotas de Chocolate

Poneros en mi situación... me levanto temprano (muy temprano), me apetece algo dulce, tengo una masa para croissants de Lidl  (ya os hablé de ella cuando preparé los cronuts) y también quiero sorprender a mi marido para desayunar ¿que harías vosotros? Lo tuve claro desde el minuto cero, unas caracolas rellenas de la crema pastelera express y para darle un poco de alegría unas gotas de chocolate. 

Si yo soy una fanática del coco mi marido lo es de la crema pastelera, se la come a cucharadas. Así que con todas esas premisas el resultado es el que veis en la foto. Un desayuno perfecto y del que mi marido quedó encantado, le prometí repetirlo más veces (la receta, no lo de madrugar tanto).

Lo preparé en muy poco tiempo y eso que la crema pastelera la hice sobre la marcha, tan solo la tuve hora y media enfriando en la nevera y estaba perfecta. Tan solo preparé la mitad porque para el relleno me era suficiente con esa cantidad y para evitar posibles tentaciones de comer el resto a cucharadas, con otro dulce o quien sabe qué se me hubiese ocurrido con ella.

La idea de esta receta la saqué del blog de Bertha. Ella me comentó que había preparado con la masa del croissant del Lidl unos cinnamon rolls y que le habían gustado mucho, que barajaba la opción de hacerlos con otros rellenos como chocolate. Anduve unos segundos dudando si rellenarlos con la crema de cacao casera o con la crema pastelera pero finalmente opté por esta última.

Creo que esta masa tiene infinidad de opciones, me va a dar muchísimo juego ya lo veréis. Es sencilla de manejar, está riquísima y te evitas tener que andar amasando, esperando tiempos de levado y estirando. Seguro que me la veréis utilizar en muchas más elaboraciones. Además tiene un precio más que asequible y te puede sacar de más de un apuro en cualquier momento o situación inesperada.

Ingredientes:

- 1 lata de masa de croissants de Lidl.
- La mitad de la receta de la crema pastelera express.
- 40-50 grms de gotas de chocolate.
- 20 grms de mantequilla derretida.
Para el glaseado:
- 4 cucharadas de azúcar glass.
- 2 cucharadas de leche.

Preparación:

Abriremos el bote de la masa de croissants y la pondremos sobre nuestra mesa de trabajo. Sobre la la masa, y con ayuda del dorso de una cuchara, extenderemos la crema pastelera por toda ella. Espolvorearemos las gotas de chocolate negro y enrollaremos. Obtendremos un cilindro del cual cortaremos lonchas de 1,5cm de grosor y las iremos depositando en la bandeja del horno, sobre la que habremos puesto un silpat o papel de horno. Iremos colocando las caracolas unas al lado de las otras (si quieres puedes ponerlas independientes para que cojan una forma redondeada perfecta). Una vez colocadas todas las caracolas en la bandeja las pincelaremos con la mantequilla y las hornearemos a 180º, horno precalentado y con calor arriba y abajo, durante 15-20 minutos o hasta que se nos doren ligeramente. Mientras se nos hacen mezclaremos los ingredientes del glaseado. Una vez horneadas las caracolas pincelaremos el glaseado sobre ellas. Podemos comerlas calientes, tibias o frías; de cualquiera de las formas están deliciosas.

Galletas Campurrianas de Limón

Finales de mes y yo sin traeros la galleta del reto de este mes. El tiempo se me pasa volando y cuando me he querido dar cuenta ya nos hemos plantado a finales de mes. Espero que Septiembre sea más benévolo con el tiempo y nos de un poco de tregua porque este verano no ha sido verano. 

Como hace fresquito me he dado el gustazo de comerlas con un café bien caliente y con un chocolate espeso. Son toda una delicia y el contraste de sabores ha sido espectacular.

No os he contado que en mi adolescencia me alimenté mucho, muchísimo, de galletas campurrianas (entre otras tantas muchas y diversas galletas). Así que he querido darles un homenaje a las mismas y aquellos tiempos que ya quedan tan lejanos.

Les he dado un toque especial, diferente, original; el limón. Ya sabéis que en casa mi marido es un apasionado de esta fruta y como mi suegro me ha dado unos cuantos, además de preparar lemon curd he decidido darle otro uso en varias recetas. Tiene un sabor muy intenso a limón ya que entre sus ingredientes lleva el zumo y la ralladura del limón. Me ha gustado bastante su sabor y en casa ya sabéis... han volado.

Ingredientes:

- 2 huevos.

- 160 grms de azúcar.

- Zumo de 1/2 limón (unos 25ml).

- Ralladura de 1/2 limón.

- 75 ml de aceite de girasol y un poco más para modelar las galletas.

- 1 cucharadita de extracto de vainilla.

- 1 cucharadita de levadura química.

- 360 grms de harina.

- Una pizca de sal.

Preparación:

Batiremos los huevos junto con el azúcar. A esta mezcla añadiremos el aceite, el extracto de vainilla, el zumo y la ralladura de limón. Es el momento de agregar los ingredientes secos la harina, la levadura y la sal (todos ellos tamizados). Conseguiremos una masa densa pero un tanto pegajosa. Nos untaremos bien las manos con aceite de girasol e iremos cogiendo porciones de la masa del tamaño de una pelota de pin pon y las colocaremos sobre la bandeja del horno (encima de esta habremos puesto papel de horno o un silpat). No las pondremos muy juntas ya que en el horno crecerán. Dejaremos que reposen 10 minutos. Precalentaremos el horno a 190º con calor arriba y abajo. Hornearemos a la altura media unos 15 minutos o hasta que adquieran un tono dorado.