Este año el huerto de mi padre ha dado unas peras maravillosas. Son grandes, con la mucha carne, dulzonas y enormes. En cuanto las vi mi cabeza empezó a maquinar qué recetas hacer con ellas ya que se estropean enseguida y no quería que se echaran a perder sin introducirlas en algún dulce delicioso.
¿Os acordáis de las bizcogalletas de fresa? ¿y de las de plátano? Pues quise hacer una receta similar con un resultado esponjoso, tierno pero a la vez rico y muy tentador de unas galletas y... ¡¡lo he vuelto a conseguir!!
Salen unas cuantas galletas así que mejor preparadlas para cuando tengáis una reunión familiar o queráis regalar a alguien querido. Nosotros nos las comimos todas, así de golosos somos en casa...
Podemos sustituir las pasas por chocolate pero me apetecía que tuvieran un sabor diferente y encontrarte de vez en cuando ese toque más duro y dulce de la pasa me resultó muy agradable.
Ingredientes:
- 150 grms de mantequilla a temperatura ambiente.
- 160 grms de azúcar.
- 275 grms de pera.
- 80 grms de pasas.
- 1 cucharadita de extracto de vainilla.
- 395 grms de harina.
- 15 grms de levadura química.
- Una pizca de sal.
Preparación:
Precalentaremos el horno a 190º con calor arriba y abajo. Mezclaremos la mantequilla junto con el azúcar hasta que consigamos una masa blanquecina y donde el azúcar se haya incorporado por completo a la mantequilla. Añadiremos las pasas, yo las corté en trozos pequeños para no encontrarme una pasa entera en cada bocado, y el extracto de vainilla. Incorporaremos la pera, pelada y sin corazón, en dados no muy pequeños para encontrárnoslos y aporten jugosidad. Mezclaremos ligeramente. Finalmente agregaremos los ingredientes secos la harina, la levadura y la sal; todas ellas tamizadas y mezclaremos hasta que se integren todos los ingredientes pero no mucho para que no se nos deshaga la pera. Hornearemos 12-15 minutos o hasta que adquieran un ligero tono dorado.