Hablar de turrones, de buenos turrones, es hablar de Cala Millor. Su turrón artesano es elaborado con ingredientes naturales de gran calidad como son la almendra, la miel y el azúcar. La base del turrón tiene una composición de ácidos grasos semejante a la del aceite de oliva. En estas fechas de reuniones familiares queremos lo mejor para los nuestros y con la diversidad y variedades de ellos que nos ofrece Cala Millor es difícil elegir con cual quedarnos.
Tras cuatro generaciones, han evolucionando hasta convertirse en un referente dentro de su sector. Su desarrollo en los últimos años ha sido constante y sostenible. Han aprovechado todas las ocasiones y oportunidades para implantar nuevos métodos de trabajo respetando siempre el medio ambiente y la artesanía del producto. Siendo delicados con el tratamiento de la mejor materia prima consiguen el mejor producto artesano.
En la fabricación del turrón artesano utilizan el método de pason, que consiste en calentar todos los ingredientes de forma constate, para que florezcan todos los sabores y se maceren mientras el azúcar y la miel cogen su punto de fusión, esto se alcanza a unos 120º, debemos tener en cuenta que el agua hierve a los 100º y el azúcar se convierte en caramelo a los 150º entre estas dos temperaturas, por un lado la evaporación del agua de los ingredientes y sin que se convierta en caramelo pero si tenemos que conseguir un alimento que sepa a tostado, ese el punto al que debe quedarse el turrón artesano. El turrón de calidad suprema debe llevar mas de un 45% de almendra y a poder ser para mejorar la calidad del turrón de la variedad marcona que es la mejor almendra.
En sus orígenes solo se conocían dos tipos de turrón el blando y el duro con el paso del tiempo se han ido incorporando mas sabores hoy las variedades van desde la incorporación de las frutas, a otros tipos de frutos secos como la nuez, la avellana, el pistacho y como no los chocolates aunque a estos últimos la reglamentación técnico sanitaria de los turrones obliga a llamarlos trufados por que en muchos casos no contienen almendra suficiente como para poderlos llamar turrones.
Los turrones artesanos de Cala Millor son una idea muy original de regalo para las cenas y comidas de Navidad ¿no os lo parece después de ver la buenísima pinta que tienen? Cala Millor tiene tiendas en:
- C/ Las Norias, 23 28220 Majadahonda Madrid (916 397 302),
- C/ Mieses, 6 28220 Majadahonda Madrid (916 397 302),
- Avd. Infante Don Luis, 10 28660 Boadilla del Monte Madrid (916 397 302),
- Avd. Camilo José Cela, 9 (Parque Empresarial)28232 Las Rozas Madrid (606 291 308).
Y por supuesto, si Madrid te queda muy lejos (como es mi caso) puedes adquirir sus productos en su tienda virtual donde os lo llevaran a casa para que los podáis disfrutar estas Navidades.
Los turrones artesanos son Una idea muy original de regalo para las cenas y comidas de Navidad.
Los turrones artesanos son Una idea muy original de regalo para las cenas y comidas de Navidad.
Aprovechando el turrón blando, que en casa gusta muchísimo, he decidido preparar una receta magnífica de Fe-ik*a. Servida de manera individual y en vasitos, como a mi me gusta. La mermelada que acompaña este dulce tiene un sabor contundente y con cuerpo que contrasta a la perfección con el dulzor de la crema de turrón. Se trata de un producto diferente, una mermelada de fresas al balsámico de Italian Delicat.
Ingredientes:
- 1 sobre de cuajada.
- 400 ml de leche.
- 100 ml de nata.
- 150 grms de turrón de Jijona.
- 2 cucharadas de azúcar moreno.
- 5 discos de bizcocho de medio centímetro de altura y el diámetro del vasito de presentación (yo he decidido preparar una plancha del bizcoho de turrón que preparé el año pasado para potenciar todavía aún más su sabor).
- 4 cucharaditas de mermelada de fresas al balsámico de Italian Delicat.
- 2 cucharadas de almendras fileteadas.
Preparación:
Calentaremos en un cazo la mitad de la leche con la nata, el azúcar y el turrón troceado. Cuando se haya calentado trituraremos con la batidora y cuando comience a hervir añadiremos el sobre de cuajada que habremos disuelto en la leche que hemos reservado. Sin dejar de remover retiraremos el cazo unos segundos del calor y volvermos a poner al fuego. Cuando vuelva e hervir ya estará listo para llenar los vasitos de presentación. Pondremos el disco de bizcocho ajustándolo al vaso. Decoraremos con unas almendras fileteadas, ligeramente trituradas y una cucharada de mermelada de fresas al balsámico de Italian Delicat (¡¡qué sabor tan bueno y potente!!) el contraste perfecto. Dejaremos enfriar y lo metermos en la nevera tapado con un film transparente.
Os podéis hacer con esta mermelada de fresas al balsámico así como otros muchos productos gourmet de primera calidad accediendo, siempre que queráis, a Italian Delicat a través del banner que hay en el lateral derecho del blog.