El sabor y aroma a naranja y mandarina nos indican que es invierno. La naturaleza es sabia y nos da para el cuerpo lo que necesitamos, vitamina C.
Yo he transformado "un poco" la manera de tomarnos esa vitamina C y lo he hecho en forma de bizcocho esponjoso, suave, ligero y cargado de sabor, he hecho un chiffon cake.
He utilizado una materia prima de excepción. Las mandarinas de Monzó. Con solo abrir la caja esta ya desprende un aroma a naranja y mandarina que te transporta al mismo árbol, a la recogida de la naranja. Son tersas, aromáticas y cargadísimas de zumo.
He utilizado el molde del Angel food para hacer este chiffon cake. A la hora de desmoldarlo se me ha ido un poco el cuchillo y por eso ha quedado un tanto "imperfecto". Pero que todas las imperfecciones sean como esta y estén así de ricas ¿verdad?
Te dejo con la receta porque estoy segura de que lo vas a hacer ya. Según has visto la foto y has leído los ingredientes te has dicho ¿por qué no?
Ingredientes:
- 6 huevos, separadas yemas de claras.
- 275 g de azúcar.
- 200 ml de mandarinas Monzó.
- Ralladura de 1/2 naranja.
- 120 ml de aceite de girasol.
- 300 de harina.
- 7 g de levadura química.
- 1/2 cucharadita de sal.
Preparación:
Batir con ayuda de las varillas de la batidora, las yemas con el azúcar hasta que obtengamos una crema blanquecina. Agregar el zumo y la ralladura de mandarina y el aceite y mezclar. Incorporar los ingredientes secos todos ellos tamizados, la harina y la levadura y mezclar hasta que no queden grumos. Batir a punto de nieve las claras, cuando ya las tengamos montadas agregar la sal y volver a batir; así conseguiremos que las claras queden más firmes. Incorporar las claras montadas a la masa con mucho cuidado, lo haremos con movimientos envolventes. Verter en el molde elegido, en mi caso el Angel food y sin engrasar, y hornear (con calor arriba y abajo y previamente precalentado) a 170 1 hora y 15 minutos o hasta que lo pinchemos y el palillo salga limpio. Una vez hecho sacar del horno y dejar enfriar por completo dado la vuelta.
